miércoles, 23 de enero de 2013

¿Vale la pena pensar en una educación en línea para el futuro?

Si pensamos por un segundo, es posible analizar que el  modelo de escuela como centro del saber acuñado de manera social en el siglo XIX, acotó su propuesta en la educación que privilegiaba a aquellos con aptitudes, a diferencia de la escuela de  Grecia antigua o los pueblos de Mesoamérica que sólo abrían sus puertas a las clases altas.

Sin embargo, la explosión demográfica y el paso de la educación privilegiada al derecho a la educación, como lo promulgan la mayoría de las Cartas Magnas y Constituciones alrededor del mundo, puso en la balanza la calidad de la educación por  la cantidad de educandos, haciendo que cada día se levanten más y más voces a través de artículos, conferencia y en los medios de comunicación pidiendo que la educación sea un tema sustancial, sobre todo en las agendas políticas.

Pero no es solo la currícula el problema, la escuela tradicional depende del espacio físico el cual se ha vuelto insuficiente, la atención a las clases se ha vuelto mediocre con muchos más alumnos de lo que la pedagogía propone. Además el traslado del hogar a los colegios genera un gasto económico, contaminación ambiental,  stress; se ha vuelto dependiente del clima y  de presupuestos gubernamentales lo cual ha creado climas de violencia y focos de contagios, pues muchas veces el gasto alcanza solo para pagar a los maestros pero no para cumplir con las normas higiénicas mínimas.

En este sentido, los especialistas han enfocado esfuerzos sobre todo el América Latina es quejarse y apuntar a que las mejoras vendrán con mejores presupuestos, pero el aprendizaje no es un asunto económico, como lo demuestran las más caras escuelas privadas a nivel mundial, que generan solo un 15% del talento y liderazgo a nivel mundial, el resto viene más de trabajo duro, relaciones de trabajo y suerte. Es por eso que se dice que el aprendizaje debe ser un asunto de gusto y no de gasto.

¿Hacia dónde mirar?, la propuesta es hacia un nuevo paradigma de la educación, que involucre al cerebro, a la tecnología, a todos y cada de los educandos y a sus habilidades, a una propuesta que permita reconocer a temprana edad el talento y hacerlo florecer para que sea posible tener adultos productivos, creativos y sobre todo, conscientes de lo que realmente importante.

Si el espacio se ha vuelto el problema, habrá que pensar en la educación a distancia, culturalmente rica y sin fronteras, empleando no los recursos que las políticas educativas han propuesto, poco amigables y de difícil acceso, además de costosas, sino las herramientas gratuitas, a las que todos acceden, con las que los alumnos está familiarizados, desde el lugar a donde se encuentren, con las herramientas tecnológicas a su alcance, laptops, smartphones, tabletas, buscando, compartiendo, aprendiendo desde cualquier con fin de la tierra.

Rompiendo barreras de lenguaje, culturales,  donde la única meta sea pensar, y aprender habilidades para la vida cotidiana, donde no se requiera que todos brinden LA respuesta correcta, o las respuesta que alguien cree que es correcta, sino la que la que se adecua más para resolver la necesidad dada.

Una educación provocativa, propositiva, sin horarios y estructuras cuadradas. Donde no haya horarios para aprender, sino ganas de salir adelante.

La escuela del futuro no está en las aulas, está en las mentes de quienes la reciben.


Referencias

Cano Flores, M., Figueroa Rodríguez, S., Olivera Gómez, D. y Ortega Rodríguez, Y., Escrigas, C. (2006) Perspectivas de los líderes sobre la financiación de la educación superior. Encuesta Delphi. La educación superior en el mundo 2006: La financiación de las universidades. Disponible en red: http://hdl.handle.net/2099/7298

Revista Iberoamericana de educación.  Disponible en red: http://www.oei.es/salactsi/vessuri.htm

Hall, BL. y Dragne, C. (2007)El rol de la educación superior para el desarrollo humano y social en Estados Unidos y Canadá. La educación superior en el mundo 2008: La financiación de las universidades. Disponible en red: http://hdl.handle.net/2099/7950.

Dzib Goodin, A (2012) La educación del futuro. Fronteras de la ciencia. Disponible en red: http://www.fronterasdelaciencia.com/index.php/comunidad-cientifica/106-comunidad-cientifica/investigadores/almadzib-category/134-futuro-de-la-educacion

OCDE. (2007) PISA 2006. Programa para la evaluación Internacional de Alumnos de la OCDE. Informe Español.

Latapí Sarre, P. (2006) SEP: rendición de cuentas. RMEI. 11 (29) 693-701.

2 comentarios:

  1. Hola Almita!!! gracias por tus palabras!! como siempre, hacen reflexionar.
    La nueva meta educativa, debiera ser enseñar a aprender desde y con los medios posibles, en colaboración y sin las limitaciones de las que hablas que no son más que una forma más de discriminación!!!
    Es por eso y otros motivos, mi nueva maestría en Educación en Nuevas Tecnologías, opino y apoyo la postura. Se esta trabajando para un nuevo paradigma, más incluyente, más fincional, más real para todos. El conocimiento no puede ni debe ser un privilegio sino un derecho para todos.
    Abrazos y besos "en línea" que es lo de hoy :)

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    1. La educación en línea da muchas ventajas, por ejemplo, podemos conocer otras culturas:)
      Te deseo mucho éxito en tu nuevo poryecto de vida!!

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